domingo, julio 26, 2015

Siguiendo con el agua

Si la semana pasada el agua era la protagonista de las fiestas del Carmen en Vallecas para conmemorar su Batalla Naval, ayer tocaba acercarse a La Granja de San Ildefonso para contemplar el espectáculo de sus fuentes con motivo de la festividad de Santiago Apóstol, una de las tres ocasiones en el año en la que se puede disfrutar del funcionamiento de sus ocho fuentes. Realizadas en plomo y pintadas imitando bronce y mármol, debemos a los escultores René Fremin y Jean Thierry la dirección de estas obras junto al jardinero Esteban Bouteolu entre 1720 y 1745.


Como la tradicional fuente La Cascada Nueva se encuentra en tareas de restauración, su funcionamiento se ha suplido por la anodina La Selva.


La Carrera de Caballos en la fuente dedicada al dios Neptuno, mejora considerablemente el espectáculo.


Así como en la fuente de Los Vientos.


Pero es en El Canastillo donde, además de poder contemplar un espectáculo de agua...


... la gente disfruta con la posibilidad de empaparse con el líquido elemento desbordando los límites de la fuente.


Le siguen Las ocho calles en una plaza octogonal en la que en cada ángulo hay una fuente. En la panorámica siguiente conseguimos inmortalizar a siete de las ocho.


Las ranas es la siguiente posibilidad de refrescarse un poco en la tórrida tarde veraniega. Los chorros de agua acaban formando una cortina que tapa incluso al propio sol.


Los baños de Diana es una de las fuentes más bonitas de los jardines, tanto en funcionamiento como si no.



Y finalizamos con La Fama, una fuente que lanza su chorro de agua tan alto que, dependiendo de la dirección del aire, algunos acaban literalmente mojados de nuevo.






Un recomendable espectáculo que se repetirá nuevamente el día 25 de agosto con motivo de la festividad de San Luis, patrón de este hermoso y tranquilo pueblo excepto fines de semana y fiestas de guardar.

lunes, julio 20, 2015

Batalla naval de Vallecas

Como todos los años, ayer tuvo lugar la celebración en Vallecas de la batalla naval con motivo de las fiestas del Carmen y la utópica reivindicación de "Puerto de Mar para Vallecas". Pese a que la creación de la Cofradía Marinera de Vallecas, actual organizadora del evento, es del año 2001, el origen de esta singular batalla, consistente en arrojarse agua unos a otros, se remonta al caluroso año de 1981 cuando grupos de jóvenes empezaron a refrescarse primero y empaparse unos a otros después con las bocas de riego del bulevar de Vallecas.


En un ambiente de fiesta distendida, el objetivo es mojar y ser mojado a una hora, las 16,30, en la que el sol aprieta con verdaderas ganas.


Si bien es cierto que la batalla comienza mucho antes con continuos escarceos entre los asistentes portadores de todo tipo de emblemas y reivindicaciones en sus camisetas.


El pregón de la fiesta que da inicio oficial a la batalla fue dado este año por el periodista vallecano Quique Peinado, colaborador y guionista del programa de la Sexta, Zapeando.


Una refrescante jornada la de ayer con esta singular Batalla naval de Vallecas.

domingo, julio 12, 2015

Una sagres en Sagres

El objetivo de la escapada veraniega era beber una cerveza sagres en su supuesta localidad de origen: Sagres, en el sur de Portugal muy cerca de la punta más occidental de Europa, el Cabo San Vicente.


Con unos acantilados de auténtico vértigo, podemos enorgullecernos de haber estado en el punto más occidental del continente. A pocos kilómetros, Sagres, con su fortaleza y su supuesta cerveza que motiva esta entrada.



El Algarve portugués es toda una auténtica fuente de sorpresas con su privilegiado paisaje. Haría falta mucho más tiempo del pasado allí para mostrar una mínima parte de sus numerosos encantos. Pero es lo que hay. Estableciendo como base de operaciones la prescindible Albufeira, más o menos en el medio geográfico del sur de Portugal, las excursiones tanto al este como al oeste nos desvelan una espectacular orografía.
Empezaremos por el oeste. De regreso a Albufeira, desde Cabo San Vicente, tenemos unos de los puntos más espectaculares del Algarve: Ponta da Piedade, en Lagos.


Siguiendo hacia Legoa, desvíándonos un poco al interior, Silves, para pasear bajo un tórrido sol de justicia por su castillo. El castillo de Silves fue construido entre los siglos VIII y XIII y está considerado como el mejor conservado de los castillos árabes del país vecino.


Volviendo a la costa, Praia da Marinha está considerada una de las diez mejores playas de Europa.



Y no muy lejos, Praia da Benagil, donde se puede coger un barquito que recorre la costa para mostrar la innumerable cantidad de cuevas que el agua ha ido horadando en sus escarpados acantilados con el paso de los años.


Obligatorio.




Ya cerca de Albufeira, en Péra, el Festival Internacional de esculturas de arena es una muy recomendable opción de admirar esta forma de arte efímero que lleva celebrándose desde hace unos años en esta localidad. Este año, el tema es la música y hemos querido destacar la impresionante figura de Freddy Mercury.


Hacia el este, el Algarve no es menos espectacular y lleno de encantos.
Olhos de Agua es una auténtica maravilla cuando, en los olheiros, al bajar la marea, se pone de manifiesto como surge agua dulce desde la misma arena de la playa.



Algo que ya pudieron constatar los fenicios hace algunos miles de años.


La siguiente parada es Faro, una tranquila ciudad que contrasta con la permanente algarabía de Albufeira y cuya catedral es algo realmente peculiar.


Un recorrido en barca por el parque nacional de Ría Formosa es algo altamente recomendable si se dispone de tiempo.
Y finalizamos, en este breve recorrido, en Tavira donde la visita a Isla Tavira es obligada al menos desde dos puntos: desde Quatro Aguas en barquito...



o a unos kilómetros, en Pedras D'el Rei, atravesando un pequeño puente para luego recorrer en un tren de madera la distancia hasta la Praia do Barril.



En Praia do Barril, además del oportuno bañito, podemos admirar algo realmente curioso, el cementerio de anclas consecuencia del declive de la pesca de atún en la zona.



Es indudable que el Algarve es mucho más de lo aquí expuesto, pero para muestra vale un botón. Siempre hemos sostenido que una visita a una ciudad, dure el tiempo que dure, no es más que una mínima instantánea de la intensa y larga existencia de esa ciudad o lugar. Pero es nuestra instantánea y son nuestros apreciados recuerdos.