Caminando entre gamusinos

Hace ya unos cuantos años iniciamos nuestra andadura en el terreno del documental. A raíz de tener conocimiento de las interesantes investigaciones llevadas a cabo por unos par de peculiares científicos, procedimos a llevar a cabo lo que pretendíamos fuese un trascendental documental para el National Geographic que traspasara la frontera de los habituales documentales de la 2: Caminando entre gamusinos.
Fueron muchas horas de trabajo y seguimiento del buen hacer de los doctores Charles Brown y Frank Primatov de la Universidad de North Rabbit Village. Ellos presumen de ser los científicos que más tiempo han dedicado al laborioso estudio de la vida y costumbres de los gamusinos.
Tras la realización del guión para el documental y mandárselo a todas las cadenas televisivas con el objeto de obtener alguna financiación para llevar a cabo el proyecto, nuestra esperanza fue en aumento al no obtener ningún no por respuesta. No obstante, nuestra esperanza se acabó desvaneciendo al no tener sencillamente respuesta alguna. ¡Lástima! Tendréis que seguir viendo los documentales de la 2.
Con motivo de aquel proyecto, tuvimos la ocasión de llevar a cabo una entrevista al doctor Frank Primatov, de origen ruso (su padre era de Albacete), durante una de sus andanzas nocturnas a la búsqueda de gamusinos.

He aquí la transcripción del momento más brillante de dicha entrevista:

-Entrevistador (en off):  Y bien, doctor, para nuestra audiencia, ¿Qué es exactamente un gamusino?
-Dr.Primatov: Exactamente, no se lo podría decir.
-Entrevistador: Y de una forma aproximada?
-Dr. Primatov: Pues tampoco.
-Entrevistador: Ehhhhh, bien. Vd. lleva años estudiando a los gamusinos, ¿a qué conclusiones ha llegado?
-Dr. Primatov: Pues a que después de las largas marchas en busca de gamusinos, lo más práctico es acercarse al garito de la esquina donde sirven un Chivas, que no es de garrafón, con un dedo de coca, cola, se entiende, y tres cubitos de hielo. ¡Está de muerte!
-Entrevistador: Y eso es significativo para su investigación.
-Dr. Primatov: No, pero te alivia algo después de una infructuosa noche de caminar entre gamusinos.

El documental comenzaba así:
Es de noche, luna llena.
De repente, una nube oscurece la luna.
Se oye un chillido desgarrador y aparecen los títulos de crédito: Caminando entre Gamusinos.
El final era el mismo que el comienzo pero continuaba con el video-clip Thriller de Michael Jackson.

Nunca llegamos a entender la falta de respuesta por parte de las cadenas televisivas a nuestra propuesta.

Adenda: Finalmente hemos encontrado a los peligrosos gamusinos

Todos íbamos en aquellos trenes

Tal día como hoy, hace once años, todos nosotros perdimos algo en aquellos trenes en los que la barbarie dejó un rastro de muerte y dolor. Pero actos así no conseguirán nunca despojarnos de nuestra dignidad. Como todos los años nuestra vela en recuerdo de todas aquellas víctimas injustamente masacradas.

Mi Biser Strip

Si hace algo más de un mes dedicábamos una entrada en este blog a Todos mis Asterix, hoy queremos hacer referencia a nuestra última adquisición consecuencia de un hallazgo casual. Las aventuras de Astérix en serbo-croata parecía una misión imposible de conseguir. En los años 80, Decje Novine publicaba en Belgrado su magacín Biser Strip, algo así como tiras o viñetas de perlas, en las que se reproducían las historias de famosos personajes de cómic como Lucky Luke, Blueberry, los Pitufos o los mismísimos galos comandados por Astérix y Obélix. La primera serie contó con 96 álbumes en color o en blanco y negro de los cuales diez números fueron traslaciones al serbo-croata de las historias de Astérix. Se trata de ejemplares bastante codiciados por los que nos dedicamos a perseguir a los galos por todo el mundo a la búsqueda de verles hablar en las diferentes lenguas a las que han sido traducidos. Muchos ejemplares de Biser Strip los teníamos en formato pdf o cbr, pero las ganas de tenerlo en formato físico nos había llevado a buscarlo por los mismísimos territorios de la antigua y extinta Yugoslavia.

Casualmente, hace unas semanas, dimos con una página en Croacia donde se vendían ejemplares de segunda mano a precio bastante irrisorio. Nuestro escepticismo fue tal que hicimos una prueba y adquirimos el primer ejemplar de Astérix en Biser Strip (el número 33) por 6,73 €, gastos de envío incluidos, Y he aquí el resultado.

La sensación de tener en las manos un ejemplar físico de Biser Strip, aunque bastante deteriorado, ha sido algo bastante especial; como indica la traducción de su propio nombre, una perla.

Ahora, a por un Stripoteka-Asteriksov Zabavnik.