Yo no he podido estar en la defensa de su Cátedra por motivos laborales; pero otros dos hermanos míos sí. La verdad es que ha puesto el listón muy alto y, por motivos técnicos, inalcanzable. Yo no me muevo en el mundillo universitario, pero aunque lo hiciera, dudo mucho que pudiera lograr los éxitos de mi hermano.
Hoy toca presumir de hermano porque nos lo merecemos; él por su logro y los hermanos porque ya nos tocaba estar en una agradable después de los últimos acontecimientos por los que nos había hecho pasar.
¡De todo corazón, hermano, felicidades!
7 comentarios:
habrá que celebrarlo de alguna manera más mundana.
Carlos
No tiene excusa, hay que celebrarlo por todo lo alto.
José Antonio
Me hubiera gustado mucho poder estar en esos moentos con mi querido tio, pero el colegio me lo ha impedido, a pesar de eso yo sabía que lo iba a conseguir.No se puede esperar menos de él.
Alba
Efectivamente ha dejado el listón demasiado alto para el resto de hermanos. Se lo merecía y todos nosotros nos sentimos muy orgullosos de él, a partir de ahora habrá que dirigirse a él como Señor Catedrático.
Chelo
Leñe, si que os parecéis...
Mi enhorabuena a tu hermano, y por tí también.
Siempre pensé que honrar al padre y a la madre era bueno, aunque yo no creo en Dios. Apreciar al hermano es la mejor manera de honrar a nuestros mauyores.
Y pese a que soy un poco "intruso", me reitero. Enorabuena a los dos.
Muchas gracias, Manuel.
Para nada se te considera un "intruso" en este blog. Tus comentarios en el mismo son siempre interesantes y entrañables.
¡Un abrazo!
¡Esta vez vamos de familiar, nada menos que uno de los pocos reyes "normolectores"! ¡La más sincera enhorabuena, porque el mundillo universitario tiene sus entrañas bien profundas, por lo que salir de ellas de esa manera como lo ha hecho tu hermano, es digno de homenajear! Ya vemos esa "marca" científica de hermanos, ¡no podía ser menos, querido Paquito!
¡¡¡Felicidades!!!
Anita
Publicar un comentario