Dos estrellas

España se ha proclamado hoy Campeona del Mundo de Balonmano. Es la segunda vez que lo consigue y, con ello, consigue su segunda estrella tras el triunfo ante Dinamarca (35-19), en una de las finales más abultadas de todos los tiempos. Desde el primer instante del partido, ha jugado con la concentración y seriedad necesaria para anular a Dinamarca, habitual coco de España en competiciones internacionales.
El deporte del balonmano consigue así convertirse en, de los deportes de equipo, el más laureado a nivel de selección nacional.
Dejando un poco de lado al waterpolo (dos campeonatos del Mundo: Perth, 1998; Fukuoka, 2001), o al inaccesible hockey sobre patines (15 veces campeona del mundo), el balonmano consigue su 2ª estrella después de la alcanzada en Túnez en 2005 ante Croacia (40-34).

Tras el éxito de la selección española de fútbol en el mundial de Sudáfrica de 2010, España es el único país campeón del mundo en los tres deportes de equipo estrella: fútbol, baloncesto y balonmano (en orden inverso al de la consecución de las estrellas).

Y lo ha hecho a lo grande, desquiciando a la selección que partía como favorita e imbatida hasta hoy: Dinamarca.
Una segunda estrella muy merecida y que pone al balonmano español un escalón por encima de los otros dos deportes en los que podemos presumir de estrella: baloncesto y fútbol.