Próximas a formar la crisálida de la que debe emerger la mariposa, las voraces orugas de Papilio machaon fueron depositadas en uno de los cuartos de baño con un tiesto con su planta nutricia en abundancia (ruda) para asegurar su alimentación durante nuestra ausencia. Un problema de cálculo hizo el resto. Las orugas formaron la crisálida antes de tiempo y no donde debían.
El resultado ha sido el improvisado mariposario que da título a esta entrada. Tranquilos que serán liberadas para que vuelen libremente por esos mundos de Dios. Pero, mientras tanto, a la espera que surjan todas ellas, la experiencia de hacer aguas mayores mientras revolotean los machaones os aseguro que es una experiencia única.
1 comentario:
¡Enhorabuena! En originalidad no os gana nadie, ¡desde luego!
No se os puede dejar visitar el mariposario de Icod, porque inmediatamente haceis un "copia y pega" y ¡encima os sale bien! ¡Realmente increíblemente bonito!
Un abrazo a lo butterfly desde la isla!
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