sábado, mayo 16, 2015

Tintin 112 – Asterix 114

Este es el resultado de la ajustada victoria de los irreductibles galos en número de traducciones sobre el internacional belga Tintín de HergéAsterix y Tintín están considerados los personajes de cómic más traducidos a otros idiomas, realmente muy pocos en comparación con el número total de lenguas que existen por el mundo, unas 6909 descritas en el año 2009 (fuente: nosotros mismos, ya que el enlace que poníamos entonces a la revista Ethnologue está roto).


Según una fuente consultada, Tintín figura en el puesto 7º de cómic más vendidos en toda su historia, con más de 200 millones de ejemplares vendidos, pero no debe ser muy de fiar porque en esa lista no figura Asterix con sus más de 350 millones de ejemplares.


Hemos utilizado las páginas Asterix around the World y Tintin around the World para analizar esa victoria de 112 a 114 a favor de los irreductibles galos.
Tintín nació en enero de 1929 y sobrevivió hasta 1976 con un total de 23 volúmenes. En 1983 la muerte sorprendió a Hergé mientras trabajaba Tintín y el Arte-Alfa que no pudo terminar. Se publicó en 1986 de forma póstuma terminada por Yves RodierGoscinny y Uderzo son los creadores de Asterix que apareció en 1959 (treinta años después de Tintín). Tras la muerte de Goscinny en 1977, Uderzo continuó en solitario a partir del número 25 de la colección, La gran zanja hasta el nº 31, Asterix y la Traviata. El último número de la serie (el 35), Asterix y los Pictos, está firmado por Jean-Yves Ferry (guionista) y Didier Conrad (dibujante). Para octubre de este año está anunciado el nuevo ejemplar de las aventuras de Asterix por Ferry y Conrad: El papiro del César (será el ejemplar nº 36).
Así las cosas, hay que reconocer que los galos juegan con cierta ventaja frente a la estrella belga cuyo resultado final sería 112 a 114, a favor de Asterix. Pero analicemos los resultados. Asterix ha sido traducido a 85 idiomas y 29 Mundart, esto es, los dialectos de origen alemán, haciendo un total de 114 idiomas. En cambio, las aventuras de Tintín, al estar situada la acción en una época más próxima en el tiempo y ser sus aventuras más internacionales, ha permitido su traducción a idiomas vetados para los galos: albanés, armenio, tibetano , wolof (Senegal), camboyano, georgiano o tahitiano. De Tintín solo hay un Mundart y, aunque esté más presente en las lenguas francesas y belgas (18 y 16, respectivamente), hay que reconocer que su presencia es más internacional.
En cualquier caso, echamos en falta la traducción de las aventuras de cualquiera de los dos a la lengua artificial klingon, lo que les haría galácticamente universales. Eso sí, no sería ninguno de los dos el primer cómic klingon de la historia.




miércoles, mayo 06, 2015

Y cesó al tercer día

Este blog ha sido testigo de muchos acontecimientos de mi vida y del devenir de los últimos tiempos, no siempre los más halagüeños pese a que, por encontrarnos a las puertas de elecciones, quieran hacernos creer la bonanza económica que disfrutamos. Yo diría más bien: que han disfrutado algunos. Bueno, el caso es que entre elecciones municipales, autonómicas y, en unos meses más las generales, tenemos la mayoría de los municipios de este país en obras fruto de la febril necesidad de hacer todo lo que no se ha hecho en los cuatro años anteriores para tratar de atrapar nuestro voto. Que cada cual elija su opción: votar libremente u optar por el voto cautivo al que se nos tiene acostumbrados.
Si hace algo más de ocho años me alegraba por la consecución de mi plaza y me entristecía por los días contados de mis compañeros/as, hoy vuelvo a tener esos mismos sentimientos enfrentados. Un Concurso de Traslado me lleva a, indudablemente, mejorar mis condiciones de vida, tanto laborales como personales. Me alegro por mí mismo pero siento cierta tristeza por lo que queda atrás: algo más de ocho años de dedicación y entrega.
Lo que me jode de todo esto es la forma de seguir haciendo las cosas en este país. Pepe Gotera y Otilio, los entrañables personajes de F. Ibáñez, no serían capaces de hacerlo peor. ¿Para qué queremos un B.O.E. o, en mi caso, un B.O.C.M. (Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid) si las propias autoridades se lo saltan a la torera? En el mencionado Concurso de Traslados disponía de tres días para cesar en mi plaza e incorporarme a mi nuevo destino, pero, por el artículo 35 (por el culo te la hinco), deciden los lumbreras de turno que no, que por cojones, independientemente de lo que diga una publicación oficial, cesamos al tercer día. ¡Joder, que no estamos en Semana Santa ni esto es algo parecido a una Resurrección!